Saurópodos

La superfamilia de los Saurópodos perteneció al infraorden de los Sauropodomorfos, que se incluía a su vez en el soborden de los Sauristiquios y en el orden Dinosaurio.

 

Los Saurópodos, nombre que quiere decir "Patas de reptil", forman un extenso grupo de dinosaurios donde se encuentran algunos de los mayores dinosaurios, y también los mayores animales terrestres que han habitado la tierra: algunos como el Seismosaurus, que se ha convertido en el mayor animal terrestre conocido por el hombre, podían llegar a medir hasta 45 metros de largo. Prosperaron desde el principio del Jurásico hasta el Cretácico tardío, desde hace aproximadamente 208 millones de años hasta hace 66 millones de años, y estuvieron extendidos por territorios del mundo entero.

Éstos enormes dinosaurios tenían un cuerpo enorme que iba estrechándose hacia delante, donde el cuello podía llegar a alcanzar los 11 metros de largo, en el caso del Ultrasauros, y hacia atrás, en una cola más larga aún. El cuello de estos enormes dinosaurios era largo, esbelto y flexible, y les servía para alcanzar las hojas más altas de los árboles. Éste enorme cuello terminaba en una cabeza de una pequeñez ridícula, comparándola con el resto de su cuerpo. Las mandíbulas no eran muy fuertes y sus dientes no eran aptos para triturar, por lo que se alimentarían de los brotes más tiernos en las copas más altas de los árboles, que se tragarían sin masticar.

La cola era gruesa en la base, pero delgada como un látigo en su extremo, por lo que es posible que la utilizara para defenderse de los enemigos. Las patas eran largas y rectas, y tenían pies con cortos dedos que presentaban garras y pezuñas que podían haber utilizado para defenderse de los depredadores. A pesar de tener una estructura ósea ligera con el fin de el peso del dinosaurio, el enorme tamaño de éstos dinosaurios hacía que algunos llegaran a superar las 100 toneladas de peso. Debido al enorme peso que tenían que soportar, debían andar sobre sus cuatro patas, por lo que eran animales cuadrúpedos, pero sin embargo, eran capaces de incorporarse sobre sus dos patas traseras para llegar a alcanzar las hojas de las partes de los árboles a las que no llegaban o también para defenderse de los depredadores.

Eran animales pacíficos que solían moverse en grandes manadas. Debido a la fragilidad de sus dientes, se piensa que vivían en zonas pantanosas donde podían alimentarse fácilmente de las blandas algas. 

 

Dentro de la superfamilia de los Ssaurópodos podemos encontrar las familias: Barapasáuridos, Braquiosáuridos, Camarasáuridos, Cetiosáuridos, Chubutisáuridos, Dicraeosáuridos, Diplodócidos, Euhelopódidos, Titanosáuridos y Vulcanodóntidos.